Por norma general hablamos a alguien que es receloso como alguien que tiene una ofensa o se siente enojado o infeliz en el momento en que alguien que conoce tiene éxito o lo realiza realmente bien en algo.
Por Mª Jesús Álava Reyes, presidenta de Apertia-Consulting y de la Fundación María Jesús Álava Reyes. Asimismo dirige el Centro Psicológico Álava Reyes y el Centro de Confort Psicológico y Popular.
Terminamos de iniciar un nuevo año, con lo que es buen instante para desarrollar elementos que nos asistan a progresar nuestro estudio y capacidades.
La asistencia espectro
Si algo sobra son los presuntos amigos del alma. De los que nos garantizan acompañamiento incondicional, de los que comentan que nos darán todo. No obstante, en el momento en que mucho más los requerimos no están. El alma gemela en un caso así es un amigo en la sombra, un fugitivo que de todos modos no ha experimentado aprecio, cariño o cooperación. Lo único que sintió en su silencio fueron celos.
Emprendimiento grupo, trabajo en grupo, propósito común… Hay ocasiones en las que en algún momento se resaltan la gente recelosas, las que menos crédito se llevan, las que no vacilan en decir que «sin mí no lo harías». No lo he hecho».
Diferencia entre celos y envidia.
Como se mentó previamente, los celos son la reacción negativa si algo que alguien hace no es otro; en cambio, los celos son el sentimiento que se genera en el momento en que existe la oportunidad de perder algo apreciado por culpa de una tercera persona
En este sentido, cabe indicar que los celos se dan por norma general por fundamentos sentimentales (ej. hijos antes de la llegada de un hermano); y los celos tienen la posibilidad de ser por cosas materiales, características y logros
La sarcástica-sádica
Sí mujer trabajadora tomando chimentos de un compañero de trabajo
Esta clase de persona toma g pero algo con bastante humor, pero que delata en el momento en que suelta sonrisas sarcásticas que son el prólogo de una enorme bomba.
ENVIDIA: EMOCIÓN NEGATIVA ️
Si bien cada cual la experimenta en distintas instantes de su historia, la envidia tiene mala popularidad.
«Se considera entre las conmuevas mucho más negativas. Es un enorme insulto mencionarle a alguien que tiene celos o que alguien se declare como tal, pues nuestra conciencia ética nos impide identificarnos de esa forma”, redacta Virginia Urrutia, psicoanalista y maestra de la Facultad de Santiago de Chile. (USACH).